Para conocer el origen de este proyecto hay que remontarse hasta el año 2005, cuando el entonces alcalde de Sestao, Alberto Lozano Martxi, y el consejero de Vivienda, Javier Madrazo, firmaron los históricos acuerdos de regeneración urbanística y social de la localidad. Después de seis años de tramitación administrativa realizada por distintos gobiernos municipales del PNv y el PSE, y una vez completado el realojo de las familias afectadas por el derribo del portal número 18 de la calle 25 de Diciembre, las excavadoras han entrado al solar a trabajar a comienzos del mes de noviembre.

Las viviendas previstas serán de distinta tipología. Así, habrá 14 viviendas de tres dormitorios, 24 viviendas de dos dormitorios y seis viviendas de un dormitorio. Los pisos más pequeños tendrán una superficie de 42 metros cuadrados y los más amplios alcanzarán los 83 metros cuadrados.

La promoción también contempla la construcción de 53 plazas de aparcamiento en el subsuelo, de las cuales 24 serán de titularidad municipal. El Ejecutivo autonómico invertirá 7,6 millones de euros en esta operación urbanística, dinero que incluye los trabajos de urbanización del entorno, entre los que se incluyen la reconstrucción de la escalinata de la calle Orixe.

La concejala de Urbanismo y portavoz del equipo de gobierno, Leire Corrales, ha valorado de forma positiva el inicio de las obras porque esta nueva promoción de viviendas supondrá una nueva mejora para el barrio de Txabarri, que tiene uno de los parque de viviendas más antiguos de la comarca. Una vez terminado el proyecto, “estas vivienda permitirán realojar a familias de otros inmuebles de la zona cuyos edificios se encuentran en muy malas condiciones sin necesidad de trasladarlos fuera de Sestao. De este modo dará comienzo un proceso en el que las nuevas viviendas alojarán a vecinos de edificios fuera de ordenación para poder rehabilitarlos o en su caso sustituirlos por otros nuevos”, ha explicado la edil.

Así se pondrá en marcha el proceso dominó que consistirá en la construcción de nuevos bloques residenciales en la zona baja de la localidad para poder ir derribando los bloques de vivienda que carecen de las garantías mínimas de habitabilidad.

El Ayuntamiento agradece al Gobierno vasco que haya mantenido su compromiso con este proyecto y pide disculpas a los vecinos del entorno por las molestias que puedan causar las obras.