El nuevo centro tendrá una superficie aproximada de 200 metros cuadrados distribuidos en distribuidos en dos aulas, zonas de dormitorio, aparcamiento de cochecitos, cocina para calentar la comida, sala de reuniones y sala de profesorado. La haurreskola contará además con todas las comodidades para el correcto cuidado y atención de los menores como por ejemplo un sistema de calefacción por suelo radiante, detectores de humo y sistemas anti-atrapamiento de dedos en las puertas. En la parte exterior se habilitará un patio de juegos con pavimento de caucho anti-caídas para los momentos de ocio de los alumnos.

Con estas obras el equipo de gobierno da cumplimiento al compromiso que adquirió con los representantes del colegio público Markonzaga. En este sentido, la concejala de Educación, Ainhoa Basabe, recuerda que “en las reuniones que mantuvimos con ellos hace un año nos comprometimos a liberar las aulas que ocupaba la haurreskola para que pudieran atender la propia demanda interna que tiene el centro escolar tras la incorporación del quinto curso de Primaria”.

Después de estudiar diferentes alternativas para la reubicación de la guardería, el Consistorio ha elegido finalmente el antiguo edificio de preescolar por ser la “menos gravosa” para las familias del barrio. “Se trata de un inmueble que se encuentra situado a muy pocos metros del colegio Markonzaga, de modo que el trastorno para los aitas y las amas va a ser mínimo. Además, de este modo mantenemos el servicio de dos haurreskolas que ofrecíamos hasta ahora, una para atender la demanda de cada ladera de Sestao”, ha añadido la edil jeltzale.

Aunque el inicio de las obras se ha demorado un poco sobre los plazos inicialmente previstos por la tramitación del papeleo y los permisos, Basabe confía en que la guardería pueda abrir sus puertas en el mes de octubre. Durante el mes de septiembre, y de forma temporal, los menores serán atendidos en la haurreskola del colegio Vista Alegre.

La apertura de la guardería no supondrá la desaparición del servicio de Berritzegune comarcal, que seguirá manteniendo toda la planta superior del edificio, es decir alrededor de 300 metros cuadrados, y algunas dependencias en la parte baja.

Como viene siendo habitual en las últimas obras municipales, el Ayuntamiento ha promovido la contratación de personas desempleadas de Sestao para que trabajen en esta obra.